¿Conoces ese momento cuando finalmente recostamos nuestros glamorosos cuerpos en el sofá con una copa de vino y de repente nos interrumpe ese tenue y siniestro "bzzzz"? Mosquitos. Y como si fuera poco, las cucarachas se entrenan para un maratón en el borde del muro y las moscas realizan acrobacias sobre su almuerzo. Es hora de tomar el asunto en nuestras propias manos, de manera elegante y natural.
Olvídate de los aerosoles tóxicos y insecticidas, que huelen a guerra química. Te presentamos tres recetas caseras sencillas pero sumamente efectivas: una trampa fermentada para mosquitos, un spray aromático de laurel contra cucarachas y un universal repelente, que enviará a los insectos directamente fuera de su apartamento. Todo esto sin ingredientes nocivos, con aroma a pureza y triunfo.
1. Trampa casera para mosquitos: una trampa fermentada que los tienta como un helado en verano
Necesitas:
- 1 taza de agua
- 5 cucharadas de azúcar
- 1 cucharada de levadura
- botella de plástico de 2 litros
Primero, hierve el azúcar y el agua a fuego lento hasta que el azúcar se disuelva. Una vez que la mezcla se convierta en un éxtasis de azúcar líquido, retírela del fuego, agregue la levadura (¡sin revolver!) y deje que la levadura haga su magia. Corte la botella por la mitad y gire la parte superior como un embudo hacia la parte inferior. Vierta la mezcla, séllela con cinta y cúbrala con un paño o cartón. Colóquelos en rincones donde a los mosquitos les gusta organizar sus fiestas nocturnas.
2. Spray de laurel y clavo: Huele a cocina de la abuela, pero un aroma mortal para los insectos.
Necesitas:
- 1 taza de agua
- 15 hojas de laurel
- 20 dientes
Este es un perfume con el sabor de la victoria sobre los insectos. Pon todos los ingredientes a hervir y deja cocinar a fuego lento durante 10 minutos para que suelte ese aroma que nos encanta pero que los insectos no soportan. Colar y guardar en una botella con pulverizador. Rocíe en todos los rincones donde se agrupan voladores y corredores no invitados.
3. Repelente de insectos: triple poder del champú, el vinagre y el aceite
Necesitas:
- ½ taza de champú (puedes usar el que compraste por error)
- ½ taza de vinagre blanco
- ½ taza de aceite vegetal
Mezclar bien todos los ingredientes y verter en una botella con pulverizador. Este spray es un producto serio: combina la suavidad del champú, la acidez del vinagre y el acabado graso del aceite. Rocíelo sobre todas las superficies donde los insectos puedan pensar que son deseables. No volverán.
¿Por qué ganan los métodos naturales?
Además de ser completamente seguras para usar cerca de niños y mascotas, estas soluciones no contienen químicos tóxicos y no contaminan el aire de su hogar. Además, olerás como la despensa de la abuela, no como un laboratorio de química.
Entonces, la próxima vez que escuche ese molesto “bzzzz” o vea una cucaracha corriendo, no se asuste; en lugar de eso, caliente la olla y active sus defensas naturales. Tu hogar se convertirá en una fortaleza libre de insectos y tú serás el orgulloso creador de un oasis de paz, libre de zumbidos y grillos.