A veces creemos que hemos seguido adelante, que hemos olvidado, que por fin nos hemos liberado de emociones y pensamientos... pero luego nos damos cuenta de que seguimos amando a la misma alma.
Créeme, no quiero que me ames.
Sería mucho más fácil si no lo fueras.
Vives una nueva vida. ¿Y yo? Ya no estoy en eso.
PERO…
… TU VOZ
Todavía puedo escucharlo en mi cabeza, como si me estuvieras hablando en este momento. Es suave, cálido y seguro. Es como veneno.
… TUS OJOS
Ojos que son como un océano. Penetrante. Grandes. Ven la realidad en la que vivimos y la ilusión de lo que sería si así fuera. Ven que una vez fui parte de ellos.
… TUS LABIOS
Labios que besaría sin cesar. No puedo borrarlos de mi memoria.
TU MENTE MARAVILLOSA
Una mente que es tan sabia, llena de conocimiento, experiencia y pensamientos maravillosos. Pensamientos que alguna vez me hicieron feliz
… TU SINCERIDAD
Sin miedo. Sin fin. Atrevido. Solo contra todo.
… TU VULNERABILIDAD
Eras tan despreocupado, devoto y sin miedo a las cosas, pero eras tan vulnerable. Y lo escondiste bien. Eres un alma como el mundo nunca ha visto.
… TU ESPONTANEIDAD
Siempre te han gustado las posibilidades que sucederán. No tenías miedo de lo inesperado. Sabías cómo responder a cada situación.
… TUS PRIORIDADES
Sabías lo que querías y lo que no. Siempre luchaste. Sabías ponerte al límite de todo y de todos.
… TU RISA
Una risa que podía poner una sonrisa en mi cara incluso cuando era mala. Difícil. Ocupado.
… EL HECHO DE COMO TE AMÉ
No podía esperar a que nos encontráramos. Escuchó. Tu escribiste. Besos y abrazos. Los momentos sin ti parecían una eternidad. los minutos se convirtieron en un año. No suelo tener eso adjunto, pero lo hice. Y mucho.
El hecho de que la relación terminó no significa que dejamos de amar a la persona.
Y probablemente nunca lo haremos. Porque las personas especiales están escritas en nuestro corazón y se quedan ahí para siempre.
Si te sientes perdido en este punto, no te avergüences. No te avergüences. Idealizar. Es parte del duelo. El dolor es el material con el que construirás la fuerza. Nosotros mismos. Un día, el alma que amas incondicionalmente en este momento será solo un hermoso recuerdo de los tiempos que permanecerán en tu corazón para siempre. ¡Y puedes estar feliz de haber estado con una persona que vale la pena anclarse allí!