Felicidad indescriptible por un lado, tristeza profunda por el otro. Los deportes son crueles. Sólo cuentan las victorias. Toda derrota es amarga, pero las victorias están hechas de derrotas, y aquellos que no pueden soportar la derrota no merecen ganar. El deporte se compone de sonrisas y gritos de alegría y otras tantas lágrimas. La Eurocopa 2016 también ofreció muchas escenas emocionales; las emociones salieron a la luz durante la interpretación del himno nacional y amargas derrotas, como la de Croacia ante Portugal, cuando Luka Modrić estaba desconsolado. Pero el clip emocional más actualizado proviene de los EE. UU., donde posiblemente el mejor jugador de fútbol de todos los tiempos, Lionel Messi, se echó a llorar después de otra derrota en la final de la Copa América. Estos son los momentos más emotivos del fútbol que hicieron llorar al mundo entero.