¿Cómo es posible que algunas personas siempre caigan de pie? ¿Como si algo invisible los guiara a través de las tormentas de la vida y siempre les susurrara la solución correcta? ¡La razón son los ángeles guardianes!
Aunque los productos lácteos se consideran una fuente importante de nutrientes, ¡no todo lo que brilla es oro!
¿Qué pasaría si alguien te dijera que tu vida cambiaría radicalmente en un instante? ¿Que una noche de luna traerá revelaciones que no esperabas? Esto no es sólo una metáfora poética: el 14 de marzo, prepárate para un fatídico evento astrológico que sacudirá los cimientos de tu existencia. ¿Qué nos trae la luna de sangre?
Entra en el supermercado. Los estantes están repletos de verduras frescas. Mientras estás eligiendo los ingredientes para la cena, notas algo extraño: los pepinos están envueltos en plástico y los calabacines están desnudos, al alcance de los clientes. ¿Por qué? ¿Son los pepinos más sensibles? ¿Tiene el plástico algún papel especial? ¿Se trata simplemente de un embalaje innecesario o es una decisión meditada?
Cuando lo bueno se vuelve molesto.
¿Cuántas veces se han tomado decisiones sólo para complacer a los demás? ¿Cuántas veces se eligió la respuesta más segura, menos atrevida, más esperada? ¿Cuántos sueños se perdieron antes de que tuvieran la oportunidad de hacerse realidad?
¿A menudo te preguntas si eres suficiente? ¿Tu valor se basa realmente en cuánto das a los demás, cuánto logras, cuánto eres aceptado?
¿Por qué parece que, a pesar de tus esfuerzos, no progresas y estás estancado? ¿Girar en un círculo vicioso, viendo a otros alcanzar sus objetivos mientras el éxito se te escapa constantemente de las manos?
Te convences de que él te ama. ¿Por qué tus esfuerzos no producen los resultados deseados? Si te encuentras en este torbellino de pensamientos, es hora de detenerte y enfrentar la verdad.
¿Alguna vez has mirado al vacío y te has preguntado por qué te molestabas en hacerlo?
¿Alguna vez has caído en tu propia trampa? El amor puede ser maravilloso. Lleno de esperanza. Pero al mismo tiempo, también puede ser tu mayor enemigo.
Sí, lo eras. ¿Lo olvidaste?