Cuando un gerente de hotel revela un truco de limpieza que realmente funciona (y no necesitas un laboratorio, solo vinagre, bicarbonato de sodio y un poco de agua caliente). Sí, tu casa puede brillar como el baño de un hotel de cinco estrellas. ¡Prueba un limpiador casero!
¿Cómo funciona un limpiador casero? ¿Conoces esa sensación que tienes cuando entras en una habitación? del hotel ¿Y te envuelve el aroma a limpieza, frescura y una ligera nota de eucalipto? ¿Qué pasaría si te dijéramos que también puedes crear esta sensación en casa, sin costosos equipos de limpieza ni fórmulas químicas que parecen sacadas de la nada? Harry Potter? Descubra un truco brillante y sencillo que se utiliza en hoteles y que cambiará para siempre su forma de ver la limpieza.
Ingredientes mágicos para el limpiador (seguramente ya tengas todo en casa):
- 1 taza de vinagre blanco
- 1/2 taza de bicarbonato de sodio
- Agua caliente
- Aceite esencial (si quieres que tu casa huela como una experiencia de spa)
- Pulverizador o recipiente
Pasos para un hogar radiante (y fragante)
- Mezcla vinagre y bicarbonato de sodio en un recipiente: ¡prepárate para un mini espectáculo de química! (Si te sientes como si estuvieras en un laboratorio escolar, ese es un efecto secundario completamente normal).
- Si lo desea, agregue unas gotas de aceite esencial: lavanda para un ambiente zen, limón para un ambiente veraniego o menta para un refresco instantáneo.
- Vierte la mezcla en una botella con atomizador o úsala directamente del recipiente (si eres de la vieja escuela).
- Rocíe sobre las superficies del baño, los azulejos, alrededor de los grifos e incluso en los desagües, en cualquier lugar donde se acumule esa desagradable “pátina de vida”.
- Déjalo actuar durante 5 a 10 minutos, lo suficiente para tomar un espresso o echar un vistazo rápido a Instagram.
- Limpiar con un paño o enjuagar con agua. Y voilá, como si un ama de llaves te cuidara con precisión suiza.
¿Por qué funciona este limpiador?
El vinagre disuelve la cal y desinfecta, mientras que el bicarbonato de sodio proporciona un poder abrasivo natural sin rayar. Juntos son como Batman y Robin en el mundo de la limpieza natural. Y sí, sin productos químicos, sin humos tóxicos y sin billetera vacía.
Consejo adicional:
Esta mezcla no sólo limpia, sino que también refresca el aire. Así que si tienes un adolescente, un perro o una vida sencilla, esta es una receta que querrás tener a mano.
Conclusión:
A veces las soluciones más efectivas son aquellas que cuestan menos. Si quieres sentirte como si estuvieras en un hotel de cinco estrellas, sin que tu tarjeta de crédito se queje, prueba este truco de limpieza de hoteles. Y tu casa olerá tan fresca que quizá empieces a cobrar por el servicio de habitación.