Si eres una persona abierta, probablemente te guste contarle a tantas personas como sea posible sobre ti. Pero no deberías hacer eso, ¡hay cosas que deberías guardarte para ti por muchas razones!
Los psicólogos dicen que debes guardarte algunas cosas, como los secretos, y no revelarlos a nadie que no sea cercano a ti. El diálogo interno excesivo aliena a otras personas y llena tu ego.
Si siente que necesita mencionar algunos de estos temas en su conversación, tómese un momento para pensar en sus razones. No siempre es una buena idea compartir todos los datos sobre usted y cada aspecto de su vida.
Detalles de tu vida
La mayoría de las personas están tratando de mejorarse a sí mismas y mejorar la calidad de sus vidas. Si bien es fantástico perder kilos de más o subir un peldaño en la escala corporativa, no debe alardear de cada paso que da con todos los que lo rodean, incluso con los extraños.
Necesitas compartir los detalles de la vida con aquellos que son parte de tu vida. No busques la validación de otras personas, porque entonces ya no estarás viviendo la vida por ti mismo. La satisfacción debe venir de uno mismo, de dentro, y no única y exclusivamente de factores externos.
Problemas familiares
Son muy pocos los que no tienen problemas familiares, y quienes se ven envueltos en ellos no se benefician de que extraños conozcan sus asuntos íntimos. Puede sentirse mejor cuando alguien se pone de su lado, pero otros miembros de la familia no se sentirán cómodos. Habrá más negatividad.
La información confidencial debe permanecer confidencial. Si las cosas son intratables, hay una diferencia entre buscar ayuda y contar historias improductivas. Es apropiado decirle al terapeuta lo que está sucediendo para que pueda comprender mejor la situación y tratar de ayudarlo.
Las buenas obras que has hecho
Si constantemente hablas de cómo estás tratando de ser una buena persona, destruyes cualquier sentido de desinterés que haya estado presente en tus acciones e intenciones. Esto también muestra una falta de respeto por los demás, ya que indirectamente estás diciendo que eres mejor que ellos.
En un intento por mejorar la opinión que los demás tienen de ti, puedes plantar semillas de duda que de otro modo no existirían. ¿Por qué estás tratando de convencer a la gente de que eres bueno? ¿Qué estás escondiendo?
Si hiciste algo bueno y te jactaste de los demás, en ese momento perdiste el karma positivo y todos los frutos del buen trabajo que ganaste en el proceso.
Tus ambiciones ocultas
Cuando hable de metas futuras, no se lo diga a todo el mundo, deje que sus acciones y logros hablen por sí mismos. Hay muchas investigaciones que respaldan el hecho de que hablar en exceso sobre una meta futura le da al poseedor de la intención una sensación prematura de plenitud. Esto reduce la probabilidad de lograr tus objetivos, ya que perderás la motivación. Es poco probable que persista en su implementación.
Si tienes algo planeado, si quieres hacer algo, no se lo digas a nadie. Tan pronto como dices esto, la probabilidad de que esto suceda disminuye en 80 %, especialmente si confiaste en una persona envidiosa.
¿Por qué las personas que hablan poco y deliberadamente logran más? ¡Porque no derrochan energía!