Una mujer fuerte nunca se da por vencida, incluso cuando todo su mundo se derrumba. Incluso cuando su corazón está pesado y sus problemas son implacables. Aún mantiene la fe de que tienes una oportunidad más y mil posibilidades más. Él sigue adelante sin importar qué.
Siempre se encontraba sola. Se encontró en situaciones en las que tuvo que defenderse y luchar contra muchas cosas por sí misma. En tiempos difíciles, aprendió que las personas pueden estar allí para ella, pero al final, ella realmente solo se tiene a sí misma y nunca se dará por vencida.
Una mujer fuerte no tiene otra opción. Aprendió a recuperarse rápidamente de las cosas que la empujan hacia abajo. Se dio cuenta de que la vida continúa incluso después del dolor y las pérdidas. Ella sabe que nunca debe darse por vencida y que debe estar lista para cambios aleatorios en su vida.
Una mujer fuerte se cuida a sí misma. No te dejes revolcar en la autocompasión. No se detiene en sus errores y no se entrega a un comportamiento tóxico y autodestructivo. Aprendió todo lo contrario, cada vez que se enfrentaba a un nuevo desafío, dolor o angustia, se recuperaba.
Ella encontró maneras de amarte y cuidarte aún más. Convierte toda la energía negativa en algo productivo. Ella sabe que estas son herramientas para su crecimiento y no permitirá que nada se interponga en su camino.
Pase lo que pase, será una mujer fuerte. siempre disponible para sus seres queridos. Ella se cuidará a sí misma y aun así hará todo su trabajo.
Se rió porque aprendió que todos los tiempos oscuros eventualmente pasan, que un corazón roto eventualmente sana y que la confusión eventualmente se convierte en claridad.
Todas las preguntas finalmente se responden y poco a poco la vida mejora. El sol vuelve a brillar, las cosas cambian, los nuevos comienzos le devuelven la fe en la vida. Y a veces la vida incluso la sorprende con algo maravilloso, incluso mejor de lo que esperaba.
Una mujer fuerte nunca se rinde a sí misma, porque sabe que todo lo demás vendrá y se irá, pero la única constante en su vida es ella. Ella es su pilar.
Una mujer fuerte se construye a sí misma, de modo que incluso si se derrumba bajo presión, sabe cómo reconstruirse.