La vida en casa puede ser una especie de competición acrobática, sobre todo cuando hay azulejos mojados en el baño, alfombras resbaladizas y una toalla inalcanzable. IKEA ha ido un paso más allá con la colección BÄSINGEN: una gama de productos inclusiva para quienes buscan mayor comodidad, seguridad y confianza en casa.
baño
¿Alguna vez has dejado tu maquillaje (polvos, rímel o labial) en el estante junto al espejo sin pensarlo? El baño puede parecer el lugar más apropiado para guardarlo, ya que es donde lo usas. Pero la verdad es que no es la mejor decisión, y hay varias razones para ello. ¿Guardas tu maquillaje en el baño?
Pocas cosas en un apartamento son tan obvias —y a la vez tan ingratas de olvidar— como la alfombra del baño. La pisamos con los pies mojados cada mañana, lleva nuestras huellas varias veces al día y, mientras tanto, absorbe con calma la humedad, las bacterias e incluso el moho. Mientras lavamos las toallas y cambiamos la ropa de cama con esmero, permanece en la sombra de las tareas domésticas, hasta que empieza a oler a humedad.
Juntas. Esas discretas líneas entre azulejos que solemos ignorar hasta que una mañana, mientras intentamos tomarnos un café tranquilamente, nos clavan la mirada en el alma. Se oscurecen lentamente, adquiriendo tonos que ni siquiera elegirías para un abrigo de invierno, y empiezan a desprender olores que nos recuerdan vagamente a un baño de sótano descuidado de los 90. ¿Cómo se limpia la junta?
El baño suele ser un lugar donde, además de la cal y el jabón, también se acumula la frustración. Fregar la bañera, quitar manchas, encontrar la proporción perfecta entre limpiador y valentía... ¿te suena? Cuando se acumulan unos pelos en el desagüe y unas manchas que ni el limpiador más publicitado puede quitar, llega un momento en que prefieres llamar al equipo de reformas y empezar de cero. Olvídate del vinagre, el bicarbonato y diez limpiadores diferentes. Todo lo que necesitas para un baño reluciente es... crema de afeitar. Y una escoba. Sí, has leído bien.
Si alguna vez alguien te ha visitado, entra al baño y pregunta, con demasiada diplomacia, "¿Qué es ese olor?", entonces sabes que tenemos un problema. Por mucho que trapees, rocíes y ventiles, hay un aroma particular que no desaparece. Sí, hablamos de orina. Ese olor persistente y molesto que puede convertir un baño en un pequeño infierno.
Los olores desagradables del desagüe y el drenaje lento del agua son uno de esos problemas domésticos que nos gusta barrer debajo de la alfombra, o mejor dicho, debajo de las baldosas del baño. Con mucha frecuencia recurrimos a productos de limpieza costosos que prometen milagros pero que al mismo tiempo contienen ingredientes que harían que incluso un químico se rascara la cabeza de preocupación. Pero existe una solución mucho más natural, sencilla y efectiva para tu desagüe, que puedes elaborar con ingredientes que tengas en tu cocina de casa.
¿Estás cansado del ambiente sofocante en tu baño? ¡Aprenda un truco genial con dos héroes de la cocina que convertirán su inodoro en un templo de aromaterapia!
Si hay un espacio en el apartamento que a menudo se pasa por alto en el mundo de las plantas de interior, ese es definitivamente el baño. Y no sin razón: a menudo falta luz solar directa, la humedad fluctúa como un calendario lunar y la temperatura cambia con cada lluvia. Pero lo que para muchas plantas es una sentencia de muerte para algunas es un auténtico nirvana tropical.
Si sientes que tu inodoro se avergüenza de su propio interior, tu bañera parece el telón de fondo de un anuncio anti-cal y tu lavabo podría fácilmente conseguir un papel en el próximo episodio de CSI: Bathroom, entonces déjanos consolarte: la culpa es del agua dura. Y no, no se trata de un fenómeno exótico que sólo afecta a edificios antiguos y tuberías deficientes. Hasta el 85% de los hogares tienen agua dura, es decir, agua que contiene una gran cantidad de minerales disueltos, principalmente calcio y magnesio.
La bañera: una vez un santuario de relajación, ahora un potencial caldo de cultivo para moho y manchas. Pero no os asustéis, no os vamos a recetar lejía ni mascarilla protectora. Preferimos mostrarte cómo limpiar tu bañera en 5 minutos con ingredientes naturales y hacerlo de una manera que hará que tu suegra te pida la receta.
Fugas. El eterno problema de todos los que soñamos con un baño o una cocina impecablemente limpios. Podemos frotar hasta cansarnos, comprar limpiadores de juntas especiales y costosos que prometen milagros... pero al final, muy a menudo solo nos quedamos con un aspecto gris y decepcionados. ¿Te suena familiar?