Todos conocemos esos días en los que preferiríamos presionar Ctrl+Alt+Supr en nuestro cuerpo, pero en lugar de eso, solemos tomarnos ese tercer café con resignación o simplemente nos dejamos llevar por la fantasía de nuestras próximas vacaciones. ¿La buena noticia? Hay maneras sencillas y algo inusuales de convencer rápidamente a tu cuerpo para que vuelva a su estado óptimo. Son pequeños trucos biológicos que no requieren preparaciones especiales, aplicaciones ni medicamentos. Engañan a tu cuerpo.
consejo
Cuando la temperatura sube de 30 grados, la vida empieza a girar en torno a encontrar sombra, una bebida fría y... la sandía perfecta. Tanto si te encantan las rodajas de sandía, los cócteles de sandía o incluso te apetece una pizza de sandía (sí, existe), una cosa está clara: la sandía es la reina del verano. Pero antes de que puedas coronarla como la estrella de tu picnic, tienes que elegir la adecuada. Y aquí es donde empieza la historia. ¿Qué significa la mancha amarilla en una sandía?
Molestas, zumbadoras y portadoras de enfermedades, las moscas no son nada bienvenidas en nuestros hogares. Por suerte, podemos repelerlas con éxito si sabemos lo que hacemos. Aquí tienes tu guía para una vida sin moscas y sin dramas. ¿Cómo repelerlas?
¿Alguna vez has lavado accidentalmente un pañuelo de papel con la ropa y has sentido como si te hubiera caído una nevada de confeti al abrir la lavadora? No te preocupes, no estás solo. Este infame desastre doméstico nos pasa incluso a los mejores, y no hay peor decepción que tener la ropa completamente lavada, pero cubierta de pelusa blanca. Pero tranquilo: hay trucos de eficacia comprobada y soluciones ingeniosas que pueden dejar tu ropa reluciente sin dejar rastro.
¿Eres de los que simplemente echan arroz en una olla, le echan agua encima y rezan para que no se pegue? ¿O eres de los que lo lavan hasta que está demasiado, creyendo que así se limpian todos los pecados del mundo? Bueno, la verdad, como siempre, está en un punto intermedio.
¿Usas el peine inmediatamente después de lavarte el pelo para desenredarlo? ¿Crees que esto es parte normal del cuidado capilar? ¿Alguna vez has considerado que podrías estar haciendo más daño que bien al hacerlo?
¿Te sientes cómodo sentado en el suelo en la postura turca? ¿Te hace sentir relajado y natural? Pero ¿te has preguntado alguna vez cómo afecta a tu cuerpo a largo plazo?
¿Te preguntas la diferencia entre las cebollas amarillas, blancas y rojas? ¡No eres el único! Si crees que una cebolla es solo una cebolla y que no importa cuál uses para la salsa boloñesa, las hamburguesas o el guacamole, te espera una revelación culinaria. Los diferentes tipos de cebolla tienen sabores, texturas y talentos culinarios completamente distintos. Cada una tiene su propia personalidad: algunas son divas espectaculares, otras, compañeras delicadas.
Aunque precalentar el horno pueda parecer obvio o incluso innecesario, este paso suele ser lo que distingue una comida mediocre de una que vale la pena recordar. Por lo tanto, el horno debe estar listo incluso antes de introducir el plato.
¿Cansado de luchar contra las malas hierbas que crecen más rápido que tus malas decisiones matutinas? Olvídese de los costosos herbicidas con ingredientes que ni siquiera un químico puede pronunciar. La solución es barata, natural y ya te espera debajo del fregadero de tu cocina. Este es un herbicida natural elaborado con solo 3 ingredientes.
Si eres una de esas personas que automáticamente tira las cáscaras de cebolla a la basura, te prometemos que después de leer este artículo las verás con nuevos ojos. Esas capas secas y con textura de papel que terminan en el contenedor de residuos orgánicos son en realidad un ingrediente secreto que muchos chefs usan en secreto… y ahora tú también puedes hacerlo. En unos sencillos pasos, puedes crear un polvo de cebolla rico y aromático que agregará profundidad y carácter a tus platos.
¿Alguna vez has soñado con que tu jardín huela como un mercado provenzal en una mañana de julio? ¿Pero acabas de suspirar al ver el precio de las plantas en maceta en el vivero? Bueno, tenemos buenas noticias para ti: puedes cultivar tu propia lavanda. Sin semillas. Sin doctorado en botánica. Con sólo un arbusto sano, tijeras y un poco de paciencia.











