La coproducción del Teatro Municipal de Ptuj y el Teatro Juvenil Esloveno vuelve a poner en escena eslovena un drama que, a pesar de su trascendencia, actualidad y intensidad, no hemos tenido la oportunidad de ver desde hace cuarenta años. La obra de Georg Büchner puede leerse como un drama sobre la Revolución Francesa, pero no es sólo...
La coproducción del Teatro Municipal de Ptuj y el Teatro Juvenil Esloveno vuelve a poner en escena eslovena un drama que, a pesar de su trascendencia, actualidad y intensidad, no hemos tenido la oportunidad de ver desde hace cuarenta años. La obra de Georg Büchner puede leerse como un drama sobre la Revolución Francesa, pero no se trata sólo de acontecimientos importantes y pasados hace mucho tiempo, sino que su grandeza reside en una visión que será eternamente relevante. Por lo tanto, el público actual lo ve principalmente como un drama sobre cuestiones eternas y nunca completamente resueltas sobre la vida, la moralidad, el significado y la ética. Jernej Lorenci, el director de esta producción, entiende la escritura de Büchner como un drama sobre la imposibilidad de la revolución, o sobre la insaciabilidad de la revolución por la sangre, sobre la duda del progreso, la evolución y la historia. La revolución, si es que es posible, definitivamente no es un fenómeno positivo, lo que se refleja en el curso de los acontecimientos. Al principio, aprendemos sobre las tres facciones que se formaron en la Revolución Francesa: los partidarios de Danton, los partidarios de Robespierre y los opositores de la revolución. La tensión básica surge de la oposición de los dos primeros, ya que no están de acuerdo sobre cómo liderar la revolución en el futuro. Después de que las dos importantes figuras políticas se reúnen, queda claro que no pueden encontrar puntos en común. Danton está encarcelado, pero conocemos a través de fragmentos su historia personal, desde la familia hasta la política pública, cuando jugó un papel importante en la configuración de la nueva sociedad francesa. Esta parte es la esencia del trabajo, ya que aquí se clasifican todas las preguntas y dudas. Lo íntimo, lo personal y lo político se entrelazan en los actores del drama sin líneas divisorias claras. Lo que separa a Danton de los demás en un cruel juego de poder es su conciencia de las cuestiones que surgen en su trabajo, por lo que también intenta retirarse del escenario político, lo cual es imposible. Su retirada a la vida privada es un acto agresivo que afecta a todos los que le rodean: amigos, antiguos socios, su esposa, opositores políticos y la propia Francia.