Diciembre es verdaderamente la época más hermosa del año. Las vacaciones de Navidad y Año Nuevo están a la vuelta de la esquina. Las luces se encienden y cada calle y rincón se engalana e ilumina mágicamente. La gente se apresura a envolver regalos y hacer resoluciones de Año Nuevo.
Quizás esté nevando ahora mismo. Los niños juegan y se divierten. El olor a canela, pan de jengibre y vino caliente llena el aire. Por un momento, parece que somos parte de un cuento de hadas.
Realmente es la época más mágica del año.
La Navidad es una prueba de que hemos capeado todas las tormentas. Que superamos con éxito un año de altibajos.
A veces, estos momentos de la vida son las únicas cosas que nos mantienen en marcha. Son nuestras pequeñas victorias, prueba de que hemos superado todos los obstáculos que la vida nos ha puesto en el camino. Prueba de que hemos superado el dolor, la pérdida y la tristeza. Prueba de que sobrevivimos, aunque hubo momentos en los que pensamos que no lo lograríamos.
Prueba de que somos realmente más fuertes de lo que pensamos. Y que todavía tenemos esperanza.
Incluso cuando estamos a punto de perder la fe. Cuando parece que no podemos más. Incluso cuando nos sentimos demasiado agotados por intentar y fallar. Incluso cuando "sangramos" por las caídas. Incluso cuando nuestros corazones ya no son capaces de amar como antes y ya no estamos seguros de lo que creemos.
Entonces, en esos momentos, todavía encontramos esperanza.
¿Sabes por qué? Porque está en nosotros. Es una parte de nosotros que nos impulsa hacia adelante. Es el aliento, la comida que comemos, el sol que nos da vida.
La esperanza es lo que nos mantiene en marcha, pase lo que pase. La esperanza nos lleva al mañana. La esperanza es algo a lo que nos aferraremos mientras respiremos.
A los que han estado conmigo este año, me tomaron de la mano, me animaron, me hicieron sonreír, me ofrecieron un hombro de apoyo, gracias. Ni siquiera te das cuenta de cómo Estoy agradecido por su apoyo.
Que tus últimos días de este año sean felices y brillantes. Y encuentras la paz, la alegría y la felicidad que buscas.
Feliz y mágica Navidad queridos amigos.