La exposición prolongada al sol también trae consecuencias menos agradables, una de las cuales es una fatiga pronunciada. Entonces, ¿por qué el sol puede tener un efecto tan poderoso en nuestra energía y bienestar? En este artículo, de la mano de expertos, desvelamos las principales causas de la fatiga solar y ofrecemos consejos prácticos sobre cómo evitarlas o mitigarlas.
Aunque el sol aporta muchos beneficios a nuestra salud y bienestar, es importante prestar atención a peligros potencialesy que trae. Si sigue los consejos anteriores, podrá reducir el riesgo de fatiga y otros efectos secundarios de la sobreexposición al sol. Para que puedas disfrutar sin preocupaciones de los días de verano, llenos de energía y sentirse bien.
Causas de la fatiga solar
Deshidración
Una de las principales consecuencias de la exposición prolongada al sol es la deshidratación. A medida que aumenta la temperatura corporal, también aumenta la necesidad de agua, ya que el cuerpo intenta enfriarse sudando. Si esta pérdida de líquido no se repone a tiempo, rápidamente se puede producir deshidratación, que se manifiesta en forma de fatiga, dolor de cabeza y confusión, entre otras cosas.
Bronceado
Las quemaduras solares no sólo causan dolor y malestar, sino que también pueden agotar significativamente el cuerpo. La piel dañada por los rayos ultravioleta requiere energía y recursos corporales adicionales para sanar, lo que puede provocar una sensación de fatiga.
Falta de nutrientes
La exposición prolongada al calor y al sol puede afectar el metabolismo y, por tanto, la necesidad de nutrientes. Las deficiencias de vitaminas y minerales clave como el magnesio, el potasio y las vitaminas B pueden contribuir a una mala salud y a una reducción de la energía.
Exposición al calor
Las altas temperaturas pueden provocar agotamiento por calor, cuyos síntomas incluyen fatiga, náuseas e incluso desmayos. La exposición prolongada a altas temperaturas ejerce una gran presión sobre los mecanismos reguladores de la temperatura del cuerpo, lo que puede agota las reservas de energía.
Radiación UV
La radiación ultravioleta no sólo afecta a la piel, sino que también puede afectar indirectamente al cansancio general. Los rayos ultravioleta aumentan la producción de melatonina, una hormona que regula el sueño, lo que puede provocar somnolencia durante el día.
Presión arterial baja
La exposición al sol puede provocar que los vasos sanguíneos se dilaten, lo que en algunos casos reduce la presión arterial. La presión arterial baja a menudo se asocia con sensaciones de náuseas y fatiga.
Cómo eliminar las causas de la fatiga solar.
Regularmente agua potable es clave para prevenir la deshidratación. Se recomienda beber más líquido de lo habitual, especialmente en días calurosos y húmedos. Usar un protector solar con SPF alto, usar un sombrero y ropa clara y de colores claros puede ayudar a prevenir quemaduras solares y otros daños a la piel. Para mantener la energía y el bienestar, es importante asegurarse de que su cuerpo reciba vitaminas y minerales necesarios. Comer frutas y verduras ricas en electrolitos y vitaminas es especialmente beneficioso. Si es posible, evite las actividades al aire libre durante las horas más calurosas del día, normalmente entre las 10 a. m. y las 4 p. m.o