Te mereces un compañero que sepa lo que tiene cuando te tiene a ti.
Mereces estar con alguien que entienda lo que vales. Con alguien que te ame, te aprecie y piense que eres más que suficiente.
Te mereces una pareja que no se vaya. Te mereces a alguien que sea paciente.
Mereces a alguien que se quede contigo pase lo que pase.
Alguien que luchará por ti cuando lo alejes en un momento de ira o tristeza.
Te mereces una pareja que, en lugar de tener miedo de los muros que has construido a tu alrededor para protegerte del dolor, haga cualquier cosa para derribarlos.
Te mereces un socio con el que siempre puedas contar.
Alguien que siempre estará ahí cuando lo necesites.
Te mereces un amor que sea seguro. Un compañero que no te dejará en el frío.
Te mereces una pareja que te haga sentir querido.
Mereces ser lo primero en lo que piensa por la mañana y lo último que recuerda antes de dormirse.
Te mereces una pareja que llame, aparezca y quiera pasar el día contigo.
Te mereces a alguien que te brinde toda su atención y aprecie cada momento que pase contigo.
Te mereces una pareja que se preocupe por ti.
Te mereces una pareja que se preocupe por ti cuando no se escuchan en todo el día.
Un socio que realmente se preocupa y quiere lo mejor para ti.
Te mereces una pareja que te ame infinitamente.
Alguien que saque lo mejor de ti. Alguien que te haga mejor persona. Alguien que te ama tanto que no puede imaginar su vida sin ti.
Alguien que, al pensar en el futuro, te imagina en él.
Te mereces una pareja que te mire como si fueras magia.
Te mereces un hombre que piense que eres lo mejor que le ha pasado.
Alguien que te ve como un premio.
Alguien que te priorice porque eres la persona más importante en su vida.
Alguien que tiene miedo de perderte. Alguien que nunca piense en ti como una carga.
Alguien que nunca sienta que tu amor es demasiado.
Alguien que sabe lo que vales y cree en su futuro juntos.
Alguien que nunca se da por vencido contigo.
Alguien que sepa lo que tiene cuando estás con él.