¿Por qué, a pesar de una dieta sana y ejercicio regular, el peso no baja como te gustaría? ¿Sientes que tienes hambre constantemente, incluso cuando comes suficientes calorías? Tal vez sea hora de centrarse en la hormona del hambre, ya que controlarla puede ayudar a mejorar el metabolismo y a perder peso sin el efecto yo-yo.
Entendiendo la hormona del hambre
grelina, también conocida como hormona del hambre, se libera en el estómago y afecta el apetito y controla diversos procesos metabólicos. Su alto nivel a menudo dificulta mantener el peso deseado, especialmente durante las dietas de adelgazamiento, ya que envía una señal sobre la necesidad de almacenar reservas de grasa.
Esto puede hacer que el metabolismo se ralentice y, a menudo, provoca un desagradable efecto yo-yo después de completar la dieta.
4 formas comprobadas de bloquear la hormona del hambre y acelerar tu metabolismo
1. Ejercicio físico intenso
Los científicos han descubierto que actividad física intensa Reduce en gran medida el nivel de grelina en el cuerpo. Después de un ejercicio extenuante, como correr en una cinta, la hormona del hambre permanece bloqueada durante varias horas, lo que reduce el apetito y ayuda a perder peso.
Los resultados son particularmente pronunciados en las mujeres, lo que sugiere que ciertos tipos de ejercicio pueden ayudar en gran medida a controlar el hambre. Sin embargo, el ejercicio más moderado, como caminatas lentas, a menudo no disminuye los niveles de grelina y, a veces, incluso los aumenta ligeramente.
2. Tomar un desayuno proteico
La primera comida del día tiene un fuerte efecto sobre los niveles de grelina. Un desayuno rico en proteínas reduce su producción y, por tanto, ayuda a reducir la sensación de hambre durante el día. Los científicos recomiendan un desayuno bajo en azúcar y grasas, que ayudará al organismo a estabilizar las hormonas. También se recomienda que desayunas inmediatamente después de despertarte, ya que esto evita que los niveles de grelina aumenten más rápido.
3. Estabilización del azúcar en sangre.
Las fluctuaciones de la glucosa en sangre pueden estimular la liberación de grelina. Los alimentos ricos en fibra ayudan a mantener estables los niveles de azúcar, lo que reduce la producción de la hormona del hambre. Es importante comer a intervalos regulares, cada 3 o 4 horas, para evitar cambios excesivos de azúcar y hambre.
4. Sueño suficiente y gestión del estrés
Dormir y el control del estrés juegan un papel importante en la regulación de la grelina. La falta de sueño y los altos niveles de cortisol, la hormona del estrés, aumentan la sensación de hambre.
La actividad física también es beneficiosa para combatir el estrés, ya que ayuda a regular el cortisol y al mismo tiempo estimula la liberación de hormonas que mejoran el estado de ánimo, como la dopamina y la serotonina.