Hay síntomas que advierten de un infarto. Comprueba cuál.
El infarto es uno de los problemas más comunes en el mundo occidental, según datos Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) sin embargo, se dice que hasta 20% de los ataques cardíacos son aquellos que guardan silencio. Se acompañan de síntomas leves que apenas son reconocibles. Es bueno reconocer estos síntomas menos típicos lo antes posible, porque de esta manera se podrá buscar ayuda de expertos a tiempo.
1. Sentir que algo te aprieta fuerte
Dolor en el pecho causado por el corazón. infarto de miocardio, se describe como agudo, punzante, también puede ser contundente. A veces, sin embargo, no está tan centrado en el pecho, sino que parece un peso en el pecho. Como la presión, cuando alguien te abraza de verdad.
2. Fatiga
Se dice que uno de los signos más comunes de un ataque cardíaco silencioso es la fatiga. Es decir, fatiga crónica en la que ya no puedes realizar tus tareas habituales. Durante un ataque cardíaco, el flujo de sangre al corazón disminuye. Esto ejerce una presión adicional sobre el músculo, lo que provoca la sensación de agotamiento.
3. Dolor en la espalda, brazos o pecho
Un dolor notable en la espalda, el pecho o los brazos (no solo el izquierdo) puede ser un signo de un ataque cardíaco silencioso. Debido a que el dolor a menudo no va acompañado de la pesadez en el pecho asociada con un ataque cardíaco, la gente suele ignorarlo. El dolor se asemeja a una tensión o un dolor muscular o el dolor con el que te despiertas por la mañana si dormiste sobre tu brazo.
4. Dolor durante el ejercicio
Si tiene arterias coronarias parcialmente bloqueadas, el flujo de sangre al corazón está restringido. Como resultado, nos sentimos más débiles, el cuerpo se inunda de dolor. Esto es más pronunciado durante el ejercicio, cuando la sangre circula por el cuerpo más rápido.
5. Dificultad para respirar inusual
Si normalmente te falta aire en la parte superior, esto podría ser una señal temprana de un ataque cardíaco silencioso.
6. Sudar sin motivo
Los sofocos, los sudores fríos y los sudores nocturnos pueden ser el resultado del envejecimiento o de cambios hormonales, o también pueden ser causados por problemas de salud cardíaca. Si suda incluso cuando no hace ejercicio ni está físicamente activo, podría tener sentido consultar a su médico.