No compras un auto nuevo sólo porque tu vecino compró uno nuevo. O porque tu viejo coche tiene más de 100.000 kilómetros en el cuentakilómetros. Deberías comprar coches nuevos principalmente por razones de seguridad, que se están volviendo más seguros de generación en generación con un montón de nuevas ayudas tecnológicas a la conducción. Los coches más seguros no sólo protegen a los pasajeros con soluciones técnicas como los airbags, sino que también ayudan al conductor a evitar y prevenir accidentes.