Te arrepentirás de no prestar más atención, de no ser un poco más sensible y cariñoso con los que perdiste. Es probable que enfrente pérdidas trágicas que son fugaces y completamente sin sentido, inexplicables e inaceptables desde el punto de vista humano.
El ego y la vanidad te harán arrepentirte muchas veces. Que no te disculpaste, que no admitiste que te equivocaste, que no corrigiste tus errores, que no les devolviste el daño a los que lastimaste.
Esto lo sentirás con todo su peso cuando te encuentres en una situación en la que alguien admita tu error, se disculpe y te pida perdón.
Recordarás todas aquellas situaciones dolorosas en las que no mostraste tu vulnerabilidad y debilidad para disculparte. Desearás poder hacerlo.
Te arrepentirás de gastar tanta energía preocupándote por cosas que siempre funcionaron solas y nunca fueron tan dramáticas y aterradoras como en tus escenarios de fantasía. Te sentirás culpable por arruinar tantos buenos momentos al preocuparte por los resultados, cosas sobre las que de todos modos no tenías control.
Te arrepentirás de no hacer lo que soñaste, principalmente por miedo.
Seguro que alguna vez has pensado en cosas así y piensas que ahora ya es demasiado tarde. Pero la próxima oportunidad llegará, no la desaproveches. Además, puedes crear tus propias oportunidades. Pensar que es demasiado tarde puede ser solo un prejuicio o una excusa para un miedo que no quieres enfrentar.
Te arrepentirás de no decirle a alguien que lo amas. No podía arriesgarse a ser rechazado. Y ni siquiera consideraste otra opción.
Cuando amas a alguien por mucho tiempo, asumes que lo sabe y que siempre estará ahí. Y luego sucede que alguien se va de tu vida y te preguntas por qué no lo hiciste Abrázalo más a menudo y dile que lo amas.
Te arrepentirás de no estar más ahí para las personas que se han ido y las extrañas. Podríamos amarlos más, ser más amables, más presentes, más accesibles. Te arrepentirás de no pasar más tiempo con ellos cuando tuviste la oportunidad.
Ama a tu prójimo, muéstrale tu amor, con acciones y palabras. Preocúpate menos por las cosas que no puedes predecir, quédate más con las personas que significan algo para ti.
La vida sucede ahora y no ofrece muchas otras oportunidades. Por lo tanto, abre tu corazón y tu mente, hazte presente en tu vida y en la vida de tus seres queridos.