Descubra cómo Tesla ha catapultado a la industria automotriz hacia el futuro con electricidad, innovación y actualizaciones digitales, mientras que los gigantes automotrices tradicionales todavía se revuelcan en la niebla de gasolina del pasado.
Se está librando una batalla en la industria automotriz, una batalla no solo por la cuota de mercado, sino por el futuro de la movilidad misma. Por un lado tenemos un montón de titanes, compañías automotrices que llevan más de un siglo forjando corceles a gasolina. Del otro lado está Tesla, una empresa que se ha apoderado del mundo con la electricidad y la tecnología digital. ¡¿Cómo un enano se convirtió en rey?!
Elon Musk contra el resto del mundo
A medida que Tesla persevera en el camino hacia un futuro eléctrico, se pueden sacar algunas conclusiones interesantes. A pesar de la falta de un siglo de experiencia en la industria automotriz, Tesla se estableció rápidamente como líder en el campo de la movilidad eléctrica. ¿Cómo es esto posible?
Permítanme comenzar distinguiendo entre Tesla y los fabricantes de automóviles clásicos. Si la industria automotriz fuera una sinfonía, las casas de coches tradicionales serían directores que siguen de cerca la partitura que crearon hace décadas. Tesla, por otro lado, es como un músico de jazz, toma una melodía básica y la cambia, improvisa, experimenta.
La rigidez de las empresas tradicionales
Rigidez es una palabra que creo que es apropiada cuando se habla de compañías de automóviles tradicionales. Estas organizaciones son como petroleros: grandes, poderosos, pero también lentos y difíciles de maniobrar. La cultura todavía se basa en los principios de producción en masa y estandarización introducidos en la época de Henry Ford.
Tesla, por otro lado, es tan rápido y ágil como una cabra montés. Con las actualizaciones digitales que se realizan por aire, Tesla permite que los conductores experimenten la sensación de tener un auto nuevo cada vez que se actualiza el software. Las marcas de coches clásicos no pueden ofrecer esto. Sus modelos se actualizan lentamente, a menudo en ciclos de varios años que dependen del lanzamiento de modelos completamente nuevos.
Una cultura de innovación
Además, Tesla tiene una cultura que fomenta la innovación en todo momento. Los fabricantes de automóviles tradicionales tienden a quedarse estancados en el pasado, comprometidos con la producción de los automóviles a gasolina que la gente está acostumbrada a comprar. Tesla, por el contrario, se centra en el futuro y está decidida a acelerar la transición hacia la energía sostenible.
Entonces, cuando miramos hacia el futuro, vemos que Tesla gana ventaja, no solo por su innovación, sino también por su compromiso con el cambio rápido. Mientras las compañías de automóviles tradicionales continúan su viaje como si fuera un lento maratón, Tesla está corriendo un sprint. Parece claro a estas alturas quién llegará primero a la meta.
Ciclos de desarrollo cambiantes: cuando cada día se convierte en un nuevo año para el automóvil
Los ciclos de desarrollo son un punto clave en el que Tesla y los fabricantes de automóviles tradicionales difieren mucho. Mientras los fabricantes tradicionales apuestan por largos ciclos de desarrollo, donde se introduce un nuevo modelo en el mercado cada cuatro años y una generación completamente nueva cada ocho años, Tesla insiste en el camino de las constantes actualizaciones digitales. Al mismo tiempo, prácticamente todas las series de automóviles salen de la línea de producción ligeramente actualizadas.
Piense en ello como la diferencia entre esperar un nuevo episodio de su serie de TV favorita cada semana y ver la temporada completa en Netflix tan pronto como esté disponible. Los fabricantes tradicionales lo engañan para que prometa una actualización futura que no será hasta dentro de unos años, mientras que Tesla ofrece nuevas actualizaciones tan pronto como estén disponibles, a veces varias veces al mes. ¡Y todo es gratis!
Estos ciclos de desarrollo continuo no son solo una característica de los automóviles Tesla, sino también un reflejo de su cultura. Esta es una empresa que no cree en esperar. Cuando una nueva tecnología o mejora está disponible, quieren entregársela a sus clientes de inmediato. Esto difiere de la mayoría de los fabricantes de automóviles tradicionales, donde los largos ciclos de desarrollo son parte de su ADN.
Esta actualización constante le da a los autos Tesla la sensación de estar siempre mejorando. Esto es algo que los fabricantes de autos clásicos simplemente no pueden ofrecer. Sus autos son tan buenos como el día que salieron de fábrica, mientras que Tesla está en constante crecimiento y evolución. Cada serie de autos contiene las últimas mejoras, mejores cámaras, menos cableado, nuevos sensores.
Cuando pensamos en lo que esto significa para el futuro, está claro que Tesla tiene una gran ventaja. Mientras que las empresas tradicionales intentan ponerse al día, Tesla avanza constantemente. No es de extrañar que obtuvieron tal ventaja.
¿Sobrevivirán las marcas tradicionales? ¿Serán devorados por el dragón chino?
Futuro marcas de coches tradicionales es algo incierto. Con el cambio cada vez mayor a la movilidad eléctrica y la presión constante del cambio climático, estas marcas enfrentan desafíos únicos. No obstante, tienen algunas fortalezas clave, que incluyen una larga historia, marcas sólidas y una extensa red global de fabricación y distribución.
Uno de los posibles escenarios es que estas marcas intentarán adaptarse rápidamente, acelerar su transición a la movilidad eléctrica y la digitalización, y adoptar ciclos de desarrollo más ágiles. Este es un proceso difícil que requiere una transformación profunda de sus procesos operativos y cultura corporativa.
Por otro lado, podría suceder que haya chinos de rápido crecimiento y otros empresas emergentes, que cultiva la misma cultura de innovación que Tesla, se ha convertido en una gran competencia. Estos nuevos jugadores pueden proporcionar un nuevo enfoque a la industria automotriz y son más flexibles en la adopción de nuevas tecnologías.
En el futuro, es posible que algunas de estas empresas emergentes se unan a las marcas de automóviles tradicionales o incluso compren algunas de estas marcas. Esto les permitiría aprovechar la capacidad de producción existente, los canales de comercialización y las marcas de estas empresas, al tiempo que introducen nuevas tecnologías y modelos de negocio innovadores.
Por ejemplo, marca, como Mercedes, BMW y Audi, podrían beneficiarse de asociarse con empresas emergentes ágiles e innovadoras para ayudarlas a transformar sus operaciones. En última instancia, el éxito o el fracaso de las marcas automotrices tradicionales depende de su capacidad para adaptarse e innovar en un entorno automotriz que cambia rápidamente.