El amor es maravilloso cuando se da y se recibe. Es esa fuerza mágica la que hace girar nuestro mundo. Pero a veces no es tan sencillo: nos involucramos en situaciones o con personas que nos lo ponen todo difícil, y es entonces cuando preferimos tirar el arma al maíz. Por eso es bueno saber con qué signo astrológico estás tratando, porque algunos son realmente difíciles de amar. ¿Qué signo astrológico amas?
La astrología lleva siglos revelando los secretos de las relaciones humanas, enseñándonos que algunos signos astrológicos se sienten más cómodos en el amor que otros. Es posible que sientas que tu pareja es decididamente demasiado dramática o que la persona que te gusta es demasiado fría y reservada. ¿Es culpa de la luna? Tal vez. Todo comienza con conocer las características de cada signo y sus enfoques específicos del amor. A continuación, revelaremos qué señales se parecen a un cálido abrazo y cuáles se parecen más a una roca sólida: firme pero difícil de alcanzar.
Tome una taza de té (o vino) y póngase cómodo mientras exploramos cómo ama cada signo y cómo a veces terminan en la lista de los "más difíciles de amar". Después de todo, el amor es como un jardín: algunas flores requieren más atención, mientras que otras prosperan sin cuidados especiales. Entonces, ¿qué signo es el más difícil de amar? ¡Vamos a ver!
- Cáncer Los cangrejos son como un cálido abrazo en un día lluvioso. Aman incondicionalmente como si el amor estuviera en oferta. Perdonan y son pacientes: verdaderos santos del amor. Esta es una señal con la que siempre puedes contar. Cáncer ejemplifica cómo debería ser el amor y cómo deberíamos amarnos unos a otros. Sin complicaciones ni dramas, por favor.
- Pez Los peces tienen el corazón más grande: ¡casi lo necesitarías en dos tamaños! Sienten profundamente, son emocionales y no tienen problemas para expresar sus deseos y necesidades. Piscis se entrega por completo, sin dejar nada sin decir. Irían al fin del mundo por la persona que aman, y sin GPS. Y este es un amor que sólo nos puede suceder una vez en la vida.
- Libra Libra quiere que las personas que la rodean sean felices y satisfechas. Literalmente torcerías tu brazo para hacer feliz a tu pareja o lo prestarías para masajearte los pies. Ella hará todo lo posible para hacerlo feliz. No es difícil amarla porque ellos siempre la aman y eso es algo que todos podríamos emular. Libra es como una red de seguridad en el circo del amor.
- Toro No hay nadie más fiel y firme que el toro. Cuando un toro ama, ama de verdad, como un reloj suizo, siempre preciso y fiable. Se entrega por completo a su pareja y se compromete. No deja nada a la imaginación, no deja nada en el aire. Todas las cartas están sobre la mesa y siempre saben lo que quieren y cuál es su situación actual en la relación. Tal lealtad es rara, así que no dejes ir al toro. A menos que huelas estabilidad, entonces valiente.
- Aries Activo, excitante, apasionado: los Aries son como un café con un triple espresso. Ponen a su pareja en el centro de su mundo, como actor principal de su personal comedia romántica. Es lo primero y tratan de serlo todo para su pareja. Animan al compañero, lo ayudan, son su apoyo. ¿A quién no le encantaría un cartel como ese?
- León Ningún signo es tan dinámico y maravilloso como Leo. Los Leo son independientes, confiados y seguros de sí mismos. Por eso es importante que cualquiera que tenga una pareja Leo se dé cuenta de que los Leo no necesitan a nadie, excepto tal vez un espejo. Pero son realmente un signo mágico y es imposible resistirse a ellos. Todo lo que hacen se vuelve más emocionante e interesante, por lo que no es de extrañar que la gente los ame.
- Mellizos Los Géminis son conocidos por su indecisión y su emocionalidad dramática, como una telenovela en vivo. Aunque esto es cierto hasta cierto punto y comunicarse con ellos a veces resulta realmente agotador, los Géminis aman con todo el corazón y se entregan por completo a aquel en quien confían y aman. A veces ese tipo de amor puede dar miedo. Pero bueno, ¿a quién no le gusta un poco de drama?
- Capricornio Los capricornianos son prácticos, eficientes y trabajadores. Si bien esto los convierte en trabajadores confiables y excelentes, también puede significar que tratan cada relación amorosa como un negocio, con un contrato y todas las legalidades. Ningún socio quiere ser juzgado por los pros y los contras. Capricornio debe aprender a confiar en su corazón tanto como confía en su cabeza. Sólo entonces encontrará el amor verdadero y duradero.
- Acuario Los Acuario son reservados y valoran su privacidad. No se abren fácilmente a las personas y les cuesta dejarlas entrar. Son difíciles de leer porque siempre mantienen la distancia. Acuario necesita a alguien en quien realmente confíe y se sienta bien con él. Esta es la única forma en que puede enamorarse y mostrar su vulnerabilidad.
- Sagitario No hay signo tan impulsivo como Sagitario. En cierto modo, esto los convierte en socios muy interesantes que nunca son aburridos. Por otro lado, es casi imposible calmarse. Están constantemente persiguiendo el próximo gran acontecimiento, la próxima aventura. Se sienten peor cuando tienen que estar quietos. Y no siempre es lo más fácil para las asociaciones. Sagitario estará más contento cuando encuentre a alguien que no sólo lo persiga, sino que corra con él.
- Escorpión Los escorpio nunca saben lo que quieren. Oscilan entre "frío y calor", lo que dificulta leerlos e interactuar con ellos a nivel emocional. Escorpio puede ser muy agotador y por eso muchas veces se encuentra en aguas solitarias. Hasta que un Escorpio madure emocionalmente, simplemente no está preparado para una relación.
- Una virgen Los virgos son el signo astrológico más autosuficiente. Enfocan las relaciones desde una posición analítica y casi gerencial. Incluso sin querer, los Virgos mantienen a las personas alejadas de ellos hasta que puedan confiar en ellos. Y esas personas no son las más fáciles de amar. Para que una virgen ame a alguien, tiene que derribar los muros que la rodean y abrirse a alguien, lo cual no está en su naturaleza. Una vez que lo hace, es un gran compañero, pero puede ser un largo camino para llegar allí.