El amor no es una calle de sentido único. No es un juego. No es algo que puedas tirar al instante.
Es respeto mutuo. Es comunicación, incluso cuando duele y las palabras no quieren salir de ti. No se trata solo de flotar en las nubes y mirar a través de lentes color de rosa. Es aceptar errores. es el perdón Es un viaje desconocido que emprenden juntos sin pretensiones ni mentiras.
Y son personas como él o ella. Gente a la que no le importan los sentimientos de los demás. Los que juegan su juego y pretenden que significas algo para ellos, los que te dan esperanza para el amor. Aquellos que solo buscan un montón de relaciones fugaces para alimentar sus egos hambrientos.
Conociste a una persona que despertó algo en ti que ya habías olvidado. Nos sumergiremos en los sentimientos de la mujer, aunque también podrían ser los suyos.
Si le preguntas si tendría una cita contigo, pero sin una intención clara, cuándo, dónde, ya la has perdido.
Si chateas con ella, escríbele, pero en sociedad te comportas como si fueran conocidos casuales, ya la has perdido.
Si le dices que la extrañas y que te gustaría estar con ella, pero no haces nada para demostrarlo, ya la has perdido.
Si tienes calor un día, frío al siguiente y dulce al siguiente, lo has perdido.
Si no te esfuerzas por querer estar con ella y sigues cambiando de planes, ya la has perdido.
Si todavía muestra interés en otras mujeres, la ha perdido.
Incluso si le dices que te gusta, que la amas, pero tus acciones no lo demuestran, la has perdido.
Perdiste a una mujer que aún creería en ti y en ser pareja, en ustedes dos. La mujer que esperaba que tomaras una decisión sobre ustedes dos, para ustedes dos. La que escuchó y leyó tus palabras de invitación y solo cerró los ojos para no notar tu pasividad. Una mujer que encerró su corazón por otros hombres que harían cualquier cosa por ella.
Has perdido a una mujer que podría amarte y aceptarte tal como eres, como nadie más podría aceptarte jamás.
Si tan solo pudieras dejarle claro lo que piensas de ustedes dos. Si tan solo pudieras responder a sus mensajes. Si tan solo pudieras mostrarle lo que se esconde detrás de tu comportamiento, tu vulnerabilidad. Créeme, te entendería.
Sabía que se había olvidado de sí misma, que se había enamorado de ti. Absolutamente. Te metiste debajo de su piel, en su corazón ingenuo. Tenía esa especial sensación de locura con la que bailaba durante el día y soñaba despierta.
Ella asume que no te preocupas por ella. Piensa en cosas en las que ni siquiera debería pensar. Y está haciendo preguntas que no deberían ser preguntas en absoluto. Ella está confundida. Pero se dio cuenta de que se había olvidado de sí misma por un tiempo y que nunca debería permitirse volver a hacerlo.
Puede que ni siquiera te des cuenta, pero le has inculcado esos sentimientos. Inadvertida o intencionalmente, pero ninguna mujer merece que le den falsas esperanzas. Ninguna mujer merece señales mixtas.
Un hombre de verdad no le da la sensación de que no le importa, ella no se pregunta cuáles son sus intenciones con él, porque es honesto, abierto, respetuoso. Un hombre de verdad no pierde su tiempo y sus emociones.
Un día te darás cuenta de que has perdido a alguien que cambiaría tu visión del amor. Has perdido el amor verdadero. Respeto. Has perdido tu verdadera masculinidad. Has perdido tu propio juego.