fbpx

Éramos "nosotros" hasta que me di cuenta de que era el único que creía en "nosotros".

Foto: envato

¿Alguna vez has sentido que encontraste algo especial, pero todo era sólo una ilusión? ¿Que las palabras que escuchaste prometían más de lo que la persona estaba dispuesta a hacer?

Casi lo creí...

La ilusión de una relación que nunca existió

Creí que había sinceridad escondida en tus palabras. Cuando me decías lo mucho que me apreciabas, sentía en esos momentos que yo era algo especial. Pero ahora sé que todo estaba vacío: sólo un reflejo de lo que quería escuchar.

Tuyo elogios Tomé tus excusas por verdad, tu paciencia por paciencia, tu evasión por una señal de inseguridad.

Quería tanto que fuera algo más que pasé por alto lo poco que estabas dispuesto a ofrecer.

Ya no sabía qué era verdad. Foto: Freepik

Casi confié en ti.

Me dijiste que no estabas lista, que tenías miedo, pero esperé de todos modos. Estaba convencido de que necesitabas tiempo. Para que cuando estés listo, veas que siempre estoy ahí en algún lugar, a tu lado.

En cambio, me mantuviste al borde, nunca lo suficientemente cerca, pero nunca lo suficientemente lejos para que pudiera alejarme.

Casi pensé que...

Todo parecía indicar que nos acercábamos lentamente a algo más grande, pero yo permanecí en el mismo lugar todo el tiempo. Estaba esperando que tus acciones siguieran a tus palabras, pero ese momento nunca llegó. Justo cuando pensé que habíamos avanzado, retrocediste otra vez.

Tus señales confusas se convirtieron en mi vida cotidiana, pero las entendí como tus dudas, no como una señal clara de que nunca me quisiste como yo te quise a ti.

Durante mucho tiempo creí que el problema era yo.

Que no fui lo suficientemente bueno para demostrarte que podías ser feliz conmigo. Me convencí de que no ofrecí lo suficiente, que pedí demasiado, que no entendía tus miedos. Pero ahora sé que no es mi culpa. Me culpé a mí mismo por tu incapacidad de amar como yo amé.

Soy feliz, sin ti vuelvo a vivir. Foto: Freepik

Sé que valgo más que "casi"

No necesito que alguien me mantenga al borde de mi vida. Aprendí que el amor no es algo que se tiene que ganar, sino algo que simplemente es.

Casi me rompió el corazón, casi… pero no lo hizo, casi… ¡me fortaleció!

“Casi” no es suficiente: ni para mí ni para nadie. Ahora sé que merezco más que promesas vacías y acciones a medias. Merezco un amor claro, pleno y completo. Y hasta que encuentre eso, Estaré orgullosamente sola porque sé que soy suficiente.

contigo desde 2004

Del año 2004 investigamos tendencias urbanas e informamos a nuestra comunidad de seguidores diariamente sobre lo último en estilo de vida, viajes, estilo y productos que inspiran con pasión. A partir de 2023, ofrecemos contenido en los principales idiomas del mundo.