¿Eres una de esas personas que disfrutan estar frente a una pantalla de televisión con una película de terror, con el corazón latiendo y la piel ardiendo? Hay una razón científica detrás de la gran popularidad de las películas de miedo, los trenes de la muerte en los parques de atracciones y las festividades como Halloween. Preguntamos por qué algunas personas disfrutan tanto del miedo y cómo es posible que esta emoción nos produzca placer.