El NIO ET9 es un automóvil que merece la atención de cualquiera que busque la combinación perfecta de lujo, tecnología y rendimiento. Está diseñado como la respuesta china a los sedanes de lujo más reconocidos como el Mercedes-Benz Clase S, el BMW Serie 7 e incluso el exclusivo Maybach. Pero el ET9 no es una berlina más, sino una auténtica joya tecnológica que combina un diseño sofisticado, un confort excepcional y la tecnología eléctrica más avanzada.
Exterior No ET9 está diseñado con una elegancia minimalista que refleja sofisticación y confianza. Con una longitud de 5.325 mm y una distancia entre ejes de 3.250 mm, ofrece una amplitud impresionante que rivaliza con los modelos tradicionales de desfile. Una característica especial es el color azul cerámico, que se pule durante hasta 60 horas, lo que confiere al vehículo un brillo y una profundidad únicos. Los faros LED de matriz delgada con la función de proyectar patrones de luz en la carretera no son sólo un elemento estético, sino también un logro tecnológico que permite la comunicación con el entorno, por ejemplo para cruzar con seguridad a los peatones. Señala a los usuarios de la vía.
Adentro No ET9 no hay lugar para el compromiso. La espaciosa cabina con materiales de primera clase y asientos de diseño ergonómico ofrece un confort que rara vez se encuentra en esta clase. Los asientos traseros se pueden inclinar hasta 45 grados e incluyen funciones de masaje, creando una atmósfera comparable a la de la cabina de un avión privado. Una mini nevera y mesas plegables entre los asientos mejoran aún más la experiencia del usuario. Además de lujo, NIO también ofrece sostenibilidad: el interior está disponible en una versión completamente vegana en el mercado europeo, lo que refleja el compromiso de la marca con un futuro sostenible.
Debajo del capó se esconde unas prestaciones que satisfarán incluso a los conductores más exigentes. El ET9 está equipado con dos motores eléctricos que producen un total de 700 caballos de fuerza, lo que permite una aceleración de 0 a 100 km/h en sólo 4,3 segundos. El sistema de tracción a las cuatro ruedas proporciona un manejo excepcional, mientras que la dirección trasera reduce el radio de giro a unos impresionantes 10,9 metros. Esto significa que, a pesar de su tamaño, el ET9 es sorprendentemente ágil en el centro de las ciudades.
Uno de los elementos más impresionantes. No ET9 es su tecnología de batería. Hay dos versiones de batería, de 95 kWh y 112 kWh, que permiten una autonomía de hasta 850 kilómetros según el estándar CLTC chino, lo que corresponde a unos 650 kilómetros según el WLTP europeo. El sistema de carga rápida permite al vehículo ganar hasta 256 kilómetros de autonomía en sólo cinco minutos, una velocidad que actualmente sólo alcanzan un puñado de vehículos eléctricos en el mundo. Además, NIO también ofrece una solución única de reemplazo de batería: un proceso que demora menos de cuatro minutos y elimina todos los problemas asociados con la carga lenta.
Hablando de tecnología, ET9 es un verdadero parque tecnológico. Con el sistema integrado de dirección por cable, que elimina por completo la conexión mecánica entre el volante y las ruedas, el vehículo ofrece una precisión y capacidad de respuesta excepcionales. Además, el sistema de conducción autónoma de tercer nivel incluye LIDAR avanzado y 31 sensores, garantizando el más alto nivel de seguridad y confort. Aunque la conducción autónoma está actualmente limitada al mercado chino, está claro que el ET9 estará listo para el mercado europeo tan pronto como las condiciones regulatorias lo permitan.
En cuanto a precio, el ET9 en el mercado chino parte de los 87.000 euros (sin batería) o 100.000 euros con batería incluida. En Europa, donde se espera la llegada del vehículo en 2026, se espera que el precio ronde los 120.000 euros debido a los aranceles adicionales. Esto lo sitúa directamente entre la Clase S de Mercedes-Benz y el Maybach, pero con muchas más funciones incluidas en el precio base.
El NIO ET9 no es sólo un automóvil, sino una manifestación del futuro, donde la alta tecnología y el lujo se unen. Con ello, la industria automotriz china está enviando un mensaje claro: estamos listos para el juego global. Fabricantes alemanes, tomen nota: el futuro está aquí y se llama NIO.