¿Qué pasa cuando el mimo se combina con el cuidado natural? ¿Crees que es posible disfrutar de un delicioso chocolate de una forma que no implique una cuchara o un cubo? ¿Sabías que el chocolate no sólo sirve para mimar tu paladar, sino también para mimar tu piel? ¡Sí, es una mascarilla de chocolate!
¿Por qué elegir el chocolate para el cuidado de la piel?
Chocolate No es solo una dulce tentación, pero también un aliado natural de la belleza. Contiene una gran cantidad de sustancias que tienen un efecto beneficioso sobre el aspecto y la salud de la piel. Contiene antioxidantes que ralentizar el envejecimientoy ácidos grasos que ayudan a restaurar la barrera protectora natural de la piel. No es de extrañar que se esté convirtiendo en un ingrediente clave en las mascarillas naturales que miman el rostro y el alma al mismo tiempo.
Mascarilla de chocolate: Brillo, suavidad y frescura en una sola mascarilla
Una mascarilla de chocolate no es sólo un momento de mimo, pero es un ritual que despierta la piel y le devuelve su vitalidad. Su agradable aroma alivia la tensión, mientras que los valiosos ingredientes se absorben profundamente en la epidermis. ¿El resultado? La piel se vuelve Más brillante, más suave e hidratada – como si acabaras de regresar de un breve descanso al aire libre.
Receta para una experiencia facial de chocolate
Sólo necesitas unos pocos ingredientes sencillos que puedes encontrar en la cocina de tu casa. En un bol, derretir lentamente 50 g de chocolate negro con al menos 70 g de cacao. Una vez que esté completamente disuelto, viértalo en un recipiente y agregue 2/3 de taza de leche entera. Agregue 3 cucharadas de azúcar moreno y una pizca de sal marina.
Mezclar todo bien hasta conseguir una mezcla uniforme y suave. Deje que la mezcla se enfríe un poco y luego aplíquela sobre la piel limpia del rostro con movimientos circulares. Después de unos 20 minutos, enjuágalo con agua tibia.
Cuidado especial para pieles grasas y problemáticas
Cuando la piel lucha contra el exceso de sebo e impurezas.Es importante ofrecerle algo que le ayude a respirar. En un tazón pequeño, mezcle 1 cucharada de cacao, una pizca pequeña de canela y 1 cucharada de miel.
Si es necesario, añade un poco más de miel para conseguir una textura untable. Aplica la mascarilla en el rostro, teniendo cuidado de evitar el área de los ojos. Dejar actuar durante 20 a 30 minutos y luego enjuagar con agua fría. El uso regular, aproximadamente dos veces por semana, purificará notablemente la piel.
¿Piel seca? Es hora de un capricho de avena y chocolate.
Una combinación de cacao, avena y yogur. Ofrece una auténtica explosión de nutrientes para pieles secas y sensibles. Mezcle media taza de cacao, 3 cucharadas de avena, 3 cucharadas de yogur griego espeso y 1 cucharada de miel. Una vez que los ingredientes se combinen en una pasta espesa, frótelos suavemente sobre la piel de la cara y el cuello.
Después de 15 a 20 minutos, retira la mascarilla con agua tibia. Repite este proceso una vez a la semana para restaurar la suavidad y elasticidad de tu piel.