Nvidia y OpenAI han firmado una alianza que prevé una inversión incremental de hasta 100 000 millones de dólares en los próximos años. El objetivo es construir una infraestructura masiva con al menos 10 gigavatios de potencia informática, que permitirá entrenar a la próxima generación de modelos de inteligencia artificial. El mercado reaccionó rápidamente: las acciones de Nvidia subieron más del 4 % tras la noticia.
La carrera por el dominio de la inteligencia artificial acaba de entrar en un nuevo capítulo. nvidia, el rey de los procesadores gráficos, y IA abierta, el nombre más destacado de la industria de la IA, ha anunciado una colaboración difícil de igualar en la historia de las inversiones tecnológicas. En primer plano, se encuentra una cifra impresionante: 100 000 millones de dólares. Pero aún más impresionante es la promesa de... 10 gigavatios de potencia de cálculo, lo que equivale al consumo eléctrico de una ciudad pequeña, pero destinado exclusivamente al entrenamiento de redes neuronales.
La colaboración se formaliza mediante un supuesto acuerdo de principio, que prevé que Nvidia invertirá gradualmente en OpenAI durante los próximos años, en proporción al progreso de la construcción de la nueva infraestructura. Se espera que la primera fase comience en el segundo semestre de 2026, cuando se espera que los primeros grandes centros de datos, equipados con millones de GPU Nvidia, entren en funcionamiento. Si bien la cifra de "100 mil millones" parece un pago único, en realidad se basa en la lógica de las inversiones graduales: más sistemas, más dinero.
¿Por qué todo esto? La respuesta es simple, pero explosiva: la inteligencia artificial actual es asfixiante debido a la falta de potencia computacional. Aunque empresas como Microsoft, Google y Amazon están construyendo sus propias granjas de servidores gigantescas, IA abierta Necesita una infraestructura de una magnitud completamente nueva. Solo entonces podrá hacer realidad su visión de la «superinteligencia», un término vago pero emocionante que se usa en Silicon Valley para referirse a modelos capaces de superar los límites intelectuales humanos.
Todo esto plantea más preguntas que respuestas. La energía para sistemas de 10 gigavatios no se generará por sí sola. La pregunta es cuán sostenible será dicho consumo y quién garantizará que la infraestructura no se convierta en un cisne negro ambiental. Tampoco está clara la influencia que tendrá Nvidia en OpenAI, ya que el acuerdo de propiedad no se ha revelado. Al mismo tiempo, los reguladores de todo el mundo ya están analizando cómo regularán la concentración de poder que conlleva la conexión entre el mayor fabricante de chips de IA y el desarrollador de modelos de IA más influyente.
Sin embargo, los inversores han dejado claro lo que piensan sobre la alianza. Acciones Nvidia subió un 4,4% después del anuncio, lo que significa que el mercado cree en combinación de capitalPotencia de hardware e innovación de software. Esta alianza no solo es una señal tecnológica, sino también financiera: si tienes GPU y una idea, el futuro te favorece.
Conclusión: Colaboración entre Nvidia y OpenAI
La colaboración de Nvidia con IA abierta Es uno de los proyectos más ambiciosos en la historia de la informática. Si tiene éxito, podríamos estar presenciando el nacimiento de la infraestructura que permitirá la primera superinteligencia real. Pero por ahora, es principalmente una promesa; una promesa que deberá respaldarse con energía, regulación y una enorme confianza en que dicho poder no caerá en las manos equivocadas.
Si ha sido hasta ahora AI "Tema candente", se ha convertido ahora en un reactor industrial que será difícil de detener.