¿Te preguntas por qué te está pasando esto? Deja de preguntarte, haz algo al respecto. Sal del círculo vicioso. Cambia tus creencias.
Si se encuentra en una relación romántica, de amistad o de negocios insatisfactoria o incluso tóxica y se pregunta por qué, ha venido al lugar correcto.
Deja que lo escrito te sirva de guía para el futuro.
1. No eres honesto contigo mismo
Es posible que no responda a sus necesidades y niegue que haya algo malo en su relación o que desee algo más. No estás listo para abrazar tu verdadera naturaleza, por lo que te conformas con una relación que es, en el mejor de los casos, mediocre e infeliz.
2. Crees que puedes cambiar a la otra persona
Crees que puedes cambiar a tu pareja y moldearla a tu gusto. No miras los defectos de tu pareja ni su pasado, sino que te centras en la fantasía, en las representaciones mentales de cómo debería ser.
3. No te sientes lo suficientemente bien
Crees que no mereces la felicidad. Sientes que nadie te entiende y estás solo en este mundo. Por eso, piensas que no eres digno de la felicidad, ni que puedes abandonar la relación.
4. No eres independiente
Crees que no puedes vivir sin tu pareja. Sientes que morirías si te quedaras solo, e incluso si no estás contento con la relación, crees que es mejor que estar soltero.
5. Tienes miedo al rechazo
Piensas que nadie volverá a amarte, que te quedarás sola y que la persona que te gusta te rechazará. Teme el dolor.
Es importante comprender las causas y sus patrones en las relaciones, ya que esto le facilitará afrontarlos y resolverlos. Cuando hagas esto, tendrás el coraje de dejar cualquier relación que te lastime y te haga sentir mal.
Si no sabes por dónde empezar y de dónde viene tu comportamiento, busca ayuda profesional que te ayude a aprender sobre ti mismo y a crear relaciones que te mejoren.