Cuando la naturaleza y el grafiti se unen, se crea un arte callejero verdaderamente hermoso.
Naturaleza y urbanismo son básicamente conceptos opuestos, pero cuando se combinan, ganan valor y forman un espacio verdaderamente maravilloso. Un buen ejemplo de conectar naturaleza y arte son los artistas callejeros que incluyen elementos naturales en sus grafitis y así convierten dibujos bidimensionales en increíbles instalaciones artísticas tridimensionales.
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Los artistas que crean de esta manera deben ser conscientes de que los elementos naturales no son permanentes y, por lo tanto, su arte no durará para siempre. Pasan mucho tiempo buscando el espacio perfecto para su dibujo, pero todo el esfuerzo se ve recompensado cuando los transeúntes miran con entusiasmo sus creaciones.
Mira la combinación de naturaleza y arte callejero en la galería.