fbpx

Alimentos tóxicos: estos son 5 tipos de alimentos del refrigerador que nunca debes llevar a la boca después de la fecha de vencimiento, ni siquiera en broma

Algunas citas no son sólo para decorar, a menos que disfrutes de las visitas espontáneas a la sala de emergencias.

Strupena hrana
Fotografía: Katja Ferenga / Ai art

Probablemente conoces la situación: abres el refrigerador con hambre, encuentras un envase sospechoso de origen desconocido y te preguntas: "¿Es seguro comer esto?". Aunque a veces queremos creer que las fechas de caducidad solo nos obligan a comprar un producto nuevo, algunos alimentos no se pueden salvar ni con rezos después de su fecha de caducidad. ¡Alimentos tóxicos! Hemos seleccionado 5 tipos de alimentos que ya no son tus amigos después de la fecha de caducidad, por cruel que suene.

¡Comida tóxica! ¿Alguna vez te has parado frente al refrigerador y has mirado con ansiedad el envase sospechoso que lleva ahí tanto tiempo? Todos hemos intentado alargar la vida útil de un yogur o una crema para untar, a pesar de la elocuente advertencia de "consumir preferentemente antes de". Si bien algunos alimentos perdonan generosamente nuestra audacia, otros no lo son en absoluto: terminan en urgencias en lugar de en el estómago.

Por eso hemos seleccionado 5 tipos de alimentos cuya fecha de caducidad nunca debería ser objeto de negociación. Si valoras tu estómago (y tu preciado tiempo), mejor léelos con atención. Pero la regla de oro sigue vigente: si te parece sospechoso, huele raro y tiene un aspecto ligeramente exótico, probablemente ya no sea comestible. ¡Mucha suerte!

1. Verduras de hoja verde: cuando la ensalada se convierte en un safari bacteriano

Las verduras son saludables siempre que no sean mortales.

La rúcula, las espinacas o la berza recién envasadas pueden parecer inocentes a primera vista; después de todo, son alimentos saludables, ¿verdad? Desafortunadamente, estas inocentes hojas verdes pueden convertirse rápidamente en un caldo de cultivo ideal para bacterias, como... E. coliEs interesante que la ensalada, sinónimo de ligereza, pueda convertirse tan fácilmente en un auténtico drama para el sistema digestivo.
Consejo: Si se te pasó la fecha y la ensalada huele fatal, despídete de ella sin sentimentalismos. No querrás que su experimento científico continúe en tu estómago. ¡Es comida tóxica!

2. Untables: Cuando tu paté favorito se convierte en una bomba de tiempo

Untar con armas letales ya no está de moda.

Sabemos que las cremas para untar son una de las mejores cosas de la vida. Pero cuidado: cada vez que metes un cuchillo en una crema para untar (o incluso en mantequilla, mermelada o pan francés duro), estás creando un refugio para las bacterias. Después de la fecha de caducidad, estas cremas se convierten en algo que preferirías encontrar en un laboratorio antes que en tu rebanada de pan.
Consejo: Si quieres disfrutar de muchos más desayunos felices, respeta las fechas de caducidad del envase. Los untables que ya no sirven deberían ir a la basura.

3. Ensaladas con patatas, carne y pescado: ruleta rusa en un plato

En caso de duda, no lo pruebes.

La ensalada con carne, pescado o patatas es un éxito en cualquier picnic de verano. Pero cuidado: incluso un breve encuentro con estos ingredientes a temperatura ambiente permite que las bacterias preparen la fiesta más siniestra en tu plato. Guarda la ensalada en el refrigerador y consúmela en un plazo de 3 a 5 días; de lo contrario, te arriesgas a un contacto directo con bacterias indeseadas, como... listeria o Salmonela¡Ésta es comida venenosa!
Consejo: Si ha estado en la mesa durante algunas horas, es hora de decirle adiós: a las ensaladas no les gustan las largas estancias al aire libre.

4. Zumos recién exprimidos: salud en una botella con fecha de caducidad rápida

Cuando el jugo cambia de sabor, es una llamada de emergencia.

El jugo recién exprimido es excelente para la salud, al menos hasta que se convierte en un experimento de laboratorio. A diferencia de los jugos preparados industrialmente, cuya vida útil es casi ilimitada (debido a la pasteurización en caliente, ¡no a la magia!), los jugos naturales son un refugio para los microbios. Incluso si lo almacena como un tesoro, el jugo natural perderá su sabor y seguridad después de cuatro días.
Consejo: Si al abrir la botella el jugo huele a algo fermentado, deséchelo inmediatamente, a menos que decida convertirse en productor de vino de frutas casero.

5. Carne y pescado frescos: no todo lo que antes era fresco sigue siendo comestible

Si la carne huele mal, eso significa PARE, no “hmm, tal vez”.

La carne y el pescado frescos se conservan muy poco en el refrigerador, casi igual que un romance típico de Hollywood. El pescado se consume mejor el mismo día, el pollo y el pavo pueden durar hasta dos días, y el cerdo y la ternera hasta cinco. La carne asada debe consumirse en un plazo máximo de tres días. Si andas corto de tiempo, el congelador es tu salvación.
Consejo: Si te parece que la carne huele a puerto marinero en el que no han cambiado el pescado en una semana, mejor no la cenes.

Fotografía: Katja Ferenga / Ai art

Conclusión: cuando la comida te da una canasta, ¡tómalo en serio!

Aunque nos gusta ahorrar y a menudo nos preocupamos por la comida ("¿Cómo voy a tirarla, si estaba carísima?"), la prudencia es la madre de la sabiduría. La vida es demasiado corta para esperar en urgencias por una mala pasta de atún. ¡Esto es comida tóxica!

¿Regla de sentido común? Si tienes dudas, dile adiós. Al fin y al cabo, lo importante en la vida es mantenerse sano, no poner a prueba tus límites con alimentos de origen y fecha de caducidad dudosos.

contigo desde 2004

Del año 2004 investigamos tendencias urbanas e informamos a nuestra comunidad de seguidores diariamente sobre lo último en estilo de vida, viajes, estilo y productos que inspiran con pasión. A partir de 2023, ofrecemos contenido en los principales idiomas del mundo.