"Solo amamos verdaderamente a aquellos a quienes amamos incluso en su debilidad y en su miseria. Proteger, perdonar, consolar, este es todo el arte del amor". - Anatole Francia
El amor puede doler. El dolor puede ser aterrador. El amor es una especie de juego de azar en el que es difícil ganar. En cada relación que no funcionó, hubo una lección que se aprendió.
De vez en cuando, cuando alguien entraba en tu vida, deseabas que esa persona fuera la indicada. Que todo saldría bien esta vez. Y que no tendrías que buscar a alguien más. Pero, la relación termina y te destruye. El dolor te hace pensar que alguna vez encontrarás a la persona adecuada.
Pones una jaula alrededor de tu corazón. Entierras tus sentimientos con la esperanza de que si alguien trata de lastimarte, no sentirás nada. Eliges a los hombres y lentamente los dejas entrar en tu vida. Y cada vez que no cumplen con tus estándares, los tiras. Ya no existen.
La idea de tener una gran historia de amor suena a broma en ese momento. Te han decepcionado muchas veces, te parece que tal relación solo es posible en las novelas románticas. No eres cínico, pero eres realista. Te das cuenta de que la gente suele ser poco fiable, llena de errores y mentiras.
No te rindas. Créeme, en algún lugar de este mundo hay un hombre para ti. Solo un hombre. El único ser humano que te mostrará todas las formas en que puede amarte. Puede sonar extraño, pero a veces todo lo que tienes que hacer es creer en algo grande. en el amor
Un día conocerás a un hombre que no te mentirá. Un hombre que dirá lo que piensa. Y aunque esto lo meterá en problemas a veces, lo apreciarás por ello. Te sorprenderá su vulnerabilidad. Te hará la vida más fácil con él. Así es como debería ser el amor: simple.
No te dirá palabras que cree que querrás escuchar. Es lo suficientemente inteligente como para saber que las palabras a menudo no tienen sentido. Sus acciones te mostrarán cuánto se preocupa por ti, cuánto le gustas. Y te preguntarás dónde ha estado todo este tiempo. Captarás tu reflejo en el espejo y te darás cuenta de que estás sonriendo todo el tiempo. Y poco a poco te permitirás volver a sentir que amas.
Un día un hombre será la razón por la que los monstruos debajo de tu cama dejen de aparecer. Borrará los malos recuerdos. Él no te salvará porque verá que eres lo suficientemente fuerte para salvarte a ti mismo. Admirará tu fuerza y fortalezas y nunca se dejará intimidar por ellas.
Y entonces este será el momento en que le permitirás fusionarse con tu vida. No porque ella lo necesite, sino porque te sientes bien con él. Hay tanto amor en tu corazón y este hombre estará agradecido de recibirlo. Porque para él, estar con alguien como tú es lo mejor que le ha pasado en la vida. Y él sabe que sería un tonto si dejara que ella se alejara de él.