Los niños son los que más esperan las vacaciones de la patata, cuando se toman un descanso de la escuela durante una semana. Si desea cruzar la frontera estas vacaciones, las siguientes sugerencias le serán útiles.
Legoland, Gunzburgo
Unos buenos 500 kilómetros te separan del país de los sueños de tus hijos, Legolandia. Este último es un verdadero paraíso para los más pequeños y un poco mayores, ya que está construido con hasta 55 millones de piezas de Lego. Se ofrece entretenimiento en más de 50 atracciones que le permiten visitar varios juegos temáticos de Lego. El trayecto hasta allí no es muy corto, pero puedes hacer algunas paradas y convertirlo en unas cortas vacaciones visitando Múnich o la Catedral de Ulm.
Minimundus, Colonia
No muy lejos de la frontera entre Eslovenia y Austria, en Klagenfurt puedes encontrar un pequeño país: Minimundus. En un área de 26.000 m2, hay 159 modelos de las obras maestras arquitectónicas más bellas del mundo de más de 30 países. Los edificios a escala 1:25 están construidos con materiales originales, por lo que impresionarán no solo a los más jóvenes, sino también a los mayores con sus detalles minuciosamente elaborados. Puede extender su viaje de un día visitando el lago Vrb.
Gardalandia, Verona
Otro parque de atracciones donde el día pasa demasiado rápido. Un caso de el parque de atracciones más grande de Italia, que ocupa 200.000 m² y ofrece innumerables actividades. Los padres, que no son ajenos a la adrenalina, también se beneficiarán. A solo media hora en coche se encuentra la hermosa ciudad italiana de Verona, donde se origina la historia de Romeo y Julieta, por lo que te sugerimos que alargues un poco más el viaje y camines por las calles de la ciudad y visites alguna de sus pastelerías.