El estudio de arquitectura español Gallardo Llopis Arquitectos ha construido una residencia lineal de dos pisos en la isla española de Ibiza. Como su nombre indica, la casa está construida alrededor de tres árboles. La casa cuenta con espacios amplios y abiertos que desdibujan los límites al dividir la casa en espacios interiores y exteriores.
Dado que la parcela está rodeada por otras casas y no tiene una vista particularmente agradable, los arquitectos decidieron que la casa debería crear su propia "paisaje interior". Lo lograron con una serie de terrazas que ofrecen una agradable vista al jardín y la vegetación. El edificio fue diseñado para brindar privacidad y protegerlo de la vista de los vecinos.
Los arquitectos quitaron partes de la estructura para crear terrazas en diferentes niveles. Los espacios exteriores, propios de la arquitectura y estilo de vida mediterráneos, forman una zona vegetal de tres árboles. Cipreses, olivos y sauces dan un carácter característico al espacio exterior, así como a los espacios interiores que los rodean.
En la parte trasera de la casa, sobre la piscina, se encuentra una estructura dinámica en voladizo que brinda privacidad y protección contra el sol de verano. Hay espacios habitables en el baúl, por lo que la sala de estar está cerca de la entrada y la cocina y el comedor se fusionan con la terraza en la parte trasera. Las puertas corredizas de vidrio permiten ampliar el espacio interior para incluir la piscina y la sala de estar adyacente durante los meses más cálidos. La planta superior es más cerrada e incluye cuatro dormitorios. Una escalera conecta las plantas superiores con el sótano, donde se encuentran el garaje, el gimnasio y el lavadero.
Todo el proyecto está diseñado con una mezcla de texturas de paredes de piedra rugosa y superficies blancas lisas, complementadas con vidrio y madera. Así, la casa logra un equilibrio entre tradición y modernidad.
Foto: cabo alemán
Video: alfonso calza