Desde 1975, el 911 Turbo ha sido sinónimo de lujo y rendimiento. Cada generación mantiene una y otra vez su reputación como referencia mundial para los autos deportivos definitivos. El 911 Turbo siempre combina deportividad y funcionalidad, emotividad. Los propietarios del 911 Turbo siempre ven el suyo como una inversión. Si permanece contigo el tiempo suficiente, volverá a alcanzar su precio de compra en tres décadas. Es un 911 Turbo.
Lo último generación 911 Turbo tiene más del doble de potencia que el Turbo original con un motor de seis cilindros y tres litros, un solo sobrealimentador y 191 kW o 260 caballos.
La nueva generación del 911 Turbo Coupé y Cabriolet ha añadido algo respecto a la anterior y ofrece así un motor con potencia 427 kW (580 CV), que es 30 kW (40 hp) más que su predecesor. Ambas versiones del modelo desde cero hasta 100 km/h aceleran en 2,8 s (0,2 s más rápido), superando así el límite mágico de 3,0 s. Con 750 Nm (40 Nm adicionales) de par y sin límite de tiempo de sobrealimentación, las aceleraciones intermedias son aún más espontáneas y sin esfuerzo. La aceleración, el rendimiento y el par del nuevo Porsche 911 Turbo están, por lo tanto, al nivel de la versión de la generación anterior del 911 Turbo S. Aquí también, la transmisión PDK de 8 velocidades, que está especialmente adaptada para los modelos Turbo, se encarga de transmisión de potencia. La velocidad final se mantiene sin cambios: 320 km/h. Por primera vez, el 911 Turbo también ofrece opciones como el paquete de elementos deportivos o el paquete de elementos de aluminio, una suspensión deportiva y un sistema de escape deportivo. De esta manera, los clientes pueden personalizar su vehículo aún más según sus deseos individuales.
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