Las personas no son solo buenas o solo malas. Incluso los mejores tienen lugares oscuros, debilidades, cualidades de las que se avergüenzan o temen. Incluso en el peor de los casos, hay algo bueno que es capaz de retribuir y contribuir, nutrir y construir. Nadie ni nada es blanco y negro.
Es importante conocer tus debilidades. Ilumina tus espacios oscuros, acéptalos, compréndelos.
Las peores partes representan un cierto tipo de maestro que ayuda a conocer tu lado oscuro, a enfrentar tus rostros que escondes y que siempre has evitado.
Conectar con alguien que saca tus demonios a la superficie es una lección y tienes que dominarla. Y cuando lo haces, sigues adelante. No te quedes en esta relación.
puedes experimentarlo diferentes formas de amor en la vida, te conectas con diferentes personas, cada una de las cuales son tu espejo y tus maestros a su manera. Te encuentras con aquellos que ven lo mejor de ti y con ellos eres la mejor versión de ti mismo. Y aquellos que sacan las peores cualidades de ti, miedos que ni siquiera sabías que tenías dentro de ti, pueden hacerte pasar por un infierno. Estas personas son maestros de la manipulación y la esclavitud emocional.
Todo el mundo parte de sí mismo cuando asume y condena a los demás. Aquellos que llevan un equipaje moral y emocional dentro de sí mismos también lo ven en otras personas. Puede que no lo vean, pero están seguros de que existe. Una persona infiel y deshonesta se convencerá de que estás engañando y mintiendo, porque no entiende que hay gente que no hace esto. No cree que existan personas leales y honestas, de esas que piensan en lo que dicen y expresan lo que sienten.
Las personas moralmente corruptas, inestables y emocionalmente inmaduras presionarán todos sus botones. Seguro que a veces lograrán exprimir la combinación "adecuada" que te quite el autocontrol y la bondad y descargue ira, rabia, venganza, malicia. Te sorprenderán tus reacciones y comportamiento, sentimientos, pensamientos que antes no tenías.
Querrás lastimar a esta persona de una forma u otra para darle lo que te exige persistentemente. Pero, como no eres tú, empiezas a dudar de ti mismo y de tu valor.
Las personas que traen sus demonios a la luz tienen un control profundo de sus propios demonios. No se comunican con tu ser, con tu amor y bondad, sino con lo que reconocen como similar a ellos: con tu lado oscuro. Y no se puede tener una relación sana y estable con esas personas, esta conexión es tóxica desde el principio.
Y lo único bueno que puedes sacar de una relación así es que llegas a conocer tu lado oscuro. Una vez que lo descubras, ya no necesitarás un intermediario demoníaco.
Porque no quieres alimentar y nutrir a tus demonios, quieres expulsarlos y desterrarlos. Puedes elegir la luz, la bondad, el amor, la nobleza, porque esto es alimento para tu ser y tu alma. O puedes elegir comida demoníaca: miedo, duda, mentiras, traiciones, desesperación, inseguridad.
Cuando alguien despierte tus demonios y cuando los encuentres, agradéceles por la lección, da la vuelta y aléjate.
Encuentra a alguien que no pruebe tus valores, que no pisotee tus límites. Pero alguien que vea las virtudes en ti, que te admire, respete y crea en ti.