Si alguna vez hemos querido probar la comida cocinada y horneada por un volcán, entonces tenemos que ir a El Diablo, un restaurante en la isla de Lanzarote, que forma parte de España. Uno de los restaurantes más inusuales del mundo, con sede en el Parque Nacional de Timanfaya en las Islas Canarias, tiene una vista panorámica increíble de las montañas, y la primera idea nació allá por 1970.
La parte más importante del restaurante es la parrilla, un equipo impresionante. La parrilla descansa sobre nueve capas de roca de lastre y la lava burbujeante tiene poco menos de dos metros de profundidad. La temperatura de la parrilla es una temperatura constante de 448,8 grados centígrados y su existencia es una especie de anomalía geotérmica.
La comida horneada en un volcán es segura. Se consultó a los científicos sobre el peligro de los vapores volcánicos, y dieron luz verde al restaurante El Diablo para el método de horneado volcánico.
Otra preocupación científica, menos probable pero no imposible, es la erupción de un volcán. Teniendo en cuenta que el volcán entró en erupción por última vez en 1824, existen algunas preguntas y dudas, especialmente porque el volcán todavía se considera activo.
El volcán está siendo monitoreado y los científicos emitirán una advertencia si hay un cambio peligroso. Hasta entonces, podemos regalarnos una comida única en El Diablo. Junto a la vista de la isla, la comida con tres cursos y transporte del hotel al restaurante y viceversa, el restaurante también ofrece un recorrido por la parrilla volcánica por 50 euros.
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