Se acercan los cuarenta años, pero para que su salud y bienestar sean lo mejor posible en las próximas décadas, es correcto tomar algunas medidas para mejorar su salud y bienestar.
Estos son cinco cambios de vida que debe hacer antes de entrar en los cuarenta.
Suficiente sueño
Se recomienda paz, descanso y sueño adecuado a todas las edades, incluso cuando se acercan el cuadragésimo. Pero tal vez en este momento, más que nunca, es importante dormir de siete a nueve horas por noche.
El sueño abundante no solo está relacionado con la productividad, sino que también ayuda a frenar los malos hábitos alimenticios.
Agua
A medida que envejecemos, los beneficios para la salud del agua potable se vuelven aún más importantes. Tanto para la función renal, como para la energía y la adecuada hidratación de nuestra piel. Los cuarenta también traen un metabolismo más lento, y con una adecuada ingesta de agua, lo mantenemos lo más eficiente posible.
El consejo general es ocho vasos de agua por día, pero puede necesitar más o menos según la actividad física, la composición corporal y el clima.
Añade el levantamiento de pesas a tu rutina de ejercicios
Levantar pesas al menos dos días a la semana es fundamental para mantener la masa ósea y muscular. La masa muscular comienza a disminuir constantemente después de los 35 años, lo que conduce a una reducción del metabolismo y de la densidad ósea.
Por eso vale la pena invertir algo de tiempo en el entrenamiento con pesas, y lo mejor es pedir ayuda a un profesional, porque un entrenamiento inadecuado tiene exactamente el efecto contrario.
Cuida tus senos
El cáncer de mama afecta a una de cada ocho mujeres, por lo que la detección temprana es crucial. Usted puede hacer muchas cosas usted mismo, es decir, examinarse los senos con regularidad, justo frente a un espejo en casa.
ama tu corazon
Las enfermedades cardiovasculares son una de las principales causas de mortalidad en las mujeres, por lo que se debe prestar especial atención a la salud cardiovascular. Las mujeres desarrollan enfermedades cardiovasculares en promedio diez años más tarde que los hombres.
El riesgo de desarrollar tales enfermedades es mayor en el período posterior a la menopausia. Debido a los signos poco característicos de la enfermedad, a menudo se subestiman.